El CEO de Apple, Tim Cook, se unió a quienes presionan al Congreso estadounidense exigiendo una solución legislativa para los "dreamers", los jóvenes sin documentos a los que el expresidente Barack Obama protegió de la deportación por medio de un programa cancelado por el actual mandatario de la casa Blanca, Donald Trump.
"Es un imperativo político, económico y moral. Cuanto antes resuelva el Congreso esta situación -sobre una base permanente-, antes podrán los soñadores planificar sus vidas y desarrollar su talento", escribió en un artículo de opinión publicado en "The Washington Post" junto al millonario y donante republicano Charles Koch.
Los dos aseguran en él que sus empresas se benefician de la contratación de estos jóvenes. "Nuestras compañías son afortunadas por tener a soñadores en nuestros equipos", indicaron.
La Administración del actual presidente anunció el 5 de septiembre el final de DACA, el programa aprobado por Barack Obama en 2012 para proteger a quienes entraron ilegalmente en Estados Unidos cuando eran niños acompañando a sus padres.
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