AutoX se ha convertido en la primera compañía en poner una flota compuesta por robo taxis a circular por las calles de la ciudad de Shenzhen en China que además, son completamente autónomos.
De acuerdo con TechCrunch, esta startup de cuatro años respaldada por Alibaba, MediaTek y Shanghai Motors, está desplegando una flota de 25 vehículos no tripulados en el centro de Shenzhen, lo que marca la primera vez que un automóvil de conducción autónoma circula en China y se prueba en vías públicas sin conductores de seguridad ni operadores remotos.
Es importante resaltar esa parte: lo están haciendo sin un equipo técnico a bordo.
Usualmente, o por lo menos en la mayoría de las pruebas que se han hecho en Estados Unidos, los vehículos autónomos llevan a un copiloto a bordo que monitorea el comportamiento del vehículo y puede reaccionar activando el freno de mano en caso de que toda la tecnología a bordo falle y aunque ya se han hecho pruebas sin el factor humano de por medio, las autoridades aún no se confían del todo.
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AutoX afirma que sus autos logran una excelente eficacia gracias a un sistema de conducción autónomo de "quinta generación" que incluye un par de sensores LiDAR en los lados, sensores de radar "4D" y una detección completa de puntos ciegos. Los robotaxis pueden reaccionar incluso a los objetos más pequeños que los rodean, y la compañía está promocionando una plataforma que supuestamente sabe cómo navegar al rededor de todo, desde automóviles estacionados “ilegalmente” (probablemente se refieran a estacionados en lugares prohibidos y mal estacionados) hasta los que dan vueltas en U.
Es verdad que todavía falta un poco más para que los vehículos autónomos circulen libremente, pero estos pasos cada vez más nos acercan a ese futuro y dejan en claro que China no quiere quedarse atrás cuando los Estados Unidos comiencen a permitir el libre tránsito de dichas unidades.
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