Existen gadgets o tecnologías que, sin darnos cuenta, se convierten en parte cotidiana de nuestra vida. Eso suele pasar con los smartphones, pero también con equipos mayores como la Huawei MateStation X, una desktop con Windows que toma elementos de diseño prestados de Apple, agrega otros propios de la marca china y la hace completamente suya.
La MateStation X es grande, su monitor es de 28.2 pulgadas, pero gracias a su diseño es que ocupa un mínimo espacio para todo lo que hace y se convirtió en la compañera de la casa, especialmente de uno de mis hijos, para sus clases virtuales, trabajos y hasta juegos.
Un diseño increíble
La palabra increíble está muy sobrevalorada, se usa para todo. Pero en este caso aplica perfecto para el diseño que logró Huawei en esta MateStation X. Para empezar, todas las personas que la vieron pensaban quera un monitor.
Y no, no es un monitor, es una PC de escritorio completa. Sigo sorprendido del nivel de ingeniería y diseño.
Su enorme pantalla de 28.2 pulgadas ofrece una calidad muy por arriba de la media. Cuenta con una resolución 4K en formato 3:2, gama de colores nivel cinematográfico P3 y aparte de lo anterior es táctil de 10 puntos. Al momento de visualizar videos, juegos o simplemente trabajar en ella, la experiencia es inmersiva.
Como si eso no fuera suficiente, está equipada con un par de bocinas desarrolladas junto con Devialet, que ofrecen un sonido mucho más potente y profundo de lo que parece. En más de una ocasión tuve que acercarme o pedir que le bajaran el volumen mientras veían algún video en YouTube. Muy bien por Huawei, pues cuidaron todos los aspectos.
En su base y soporte, incluye puertos USB-C para conectarle accesorios, o para usarla como monitor de una PC adicional. Este modo no lo pude probar, pues el equipo no incluye el cable necesario para esto y yo no contaba con uno. También está el volumen, entrada de audífonos y botón de encendido.
Huawei incluye un teclado inalámbrico de tamaño completo y un mouse, también inalámbrico, en el mismo color que la desktop, por lo que todo combina a la perfección.
Hardware poderoso
En su interior, el modelo que utilizamos, llevaba un procesador AMD Ryzen 7 5800H, con 16GB de RAM y 512GB de almacenamiento SSD.
Con ese hardware, no tuvimos ningún problema en emplearla para realizar trabajos de oficina a través de Google Docs y Microsoft Office. Así como múltiples llamadas a través de Zoom y Google Meet.
También disfrutamos de series en Netflix y muchos videos en YouTube. Jamás sentímos relantizaciones o pausas. Todo corrió siempre fluido.
Luego decidimos ponernos un poco más aventureros y ponerle algunos juegos. Si bien, este equipo no está diseñado para gaming, puede ejecutar algunos juegos en configuraciones básicas y resoluciones no muy altas. Algunos títulos que pudimos disfrutar incluyen Roblox, Minecraft y Fortnite.
Un detalle importante a mencionar, si tienes otros equipos Huawei, es la interconectividad y ecosistema que puedes crear entre celulares, tablets y audífonos. En mi caso, tengo una tablet MatePad 11 y pude conectarlos de forma instantánea y extender Windows a la tablet o hacerla un espejo de la MateStation.
Una PC casi perfecta
Son pocas cosas de las que pudiera quejarme de la MateStation X. Es rápida, un diseño totalmente minimalista, innovador y silencioso, además de elegante, y su pantalla es una chulada para ver y trabajar en ella.
Además, Huawei me la prestó con Windows 10 y en pocos días se actualizó a Windows 11, lo que mejoró la experiencia y confirmó que en computadoras la marca china no tiene los problemas de sus teléfonos con Google.
El costo de la MateStation X es $39,999 MXN que no es caro, sobre todo si la comparamos con equipos similares de otras marcas.
Quizás lo más triste fue el día que se la llevaron, pues me la prestaron para evaluarla y mi hijo más chico me miró y me dijo: “papá, no quiero que se la lleven”.
Artículo publicado originalmente en El Núcleo.
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