¿En verdad nuestro iPhone se vuelve más lento cada año?

Cada año, cuando un nuevo iPhone es lanzado por Apple,una idea surge de gran parte de la comunidad: misteriosamente, nuestro teléfono, el cual tiene uno o dos años de antigüedad, empieza a tener problemas o funcionar a una velocidad de procesamiento menor. Debido a esto, conceptos como la obsolescencia programada, la idea que los gadgets y smartphones son creados con una "fecha de caducidad", empiezan a adquirir tracción: no obstante, un reciente estudio de parte de Futuremark, compañía de benchmarking, demostró que, en parte, este concepto no es del todo cierto.

De acuerdo al estudio de Futuremark, el cual fue realizado utilizando 4 modelos distintos de iPhone (5s, 6, 6s y 7), muestra que, a diferencia de lo que esperarían miles de usuarios, el desempeño del GPU y CPU de estos teléfonos no disminuye con cada nuevo sistema operativo.

En todos los benchmarks realizado por este sitio web, podemos concluir una cosa: el desempeño de nuestro smartphone no disminuye cada año debido a los componentes del mismo. No obstante, sí es cierto que, en algunos departamentos, nuestros teléfonos parecen ser cada vez más lentos: es en este punto en el cual planteamos la pregunta ¿qué hace que nuestro teléfono parezca ser más lento o menos poderoso con cada actualización?

En realidad, son muchos factores los que influyen en esta aparente obsolescencia:

• Con cada actualización de parte de Apple a su sistema operativo, los desarrolladores de aplicaciones optimizan su código para que funcione mejor con la más reciente versión de iOS: sin embargo, esto puede llevar a que ciertos cambios no tomen en cuenta a modelos antiguos de hardware.

• Algunos iPhones, al ser actualizados, no cuentan con todas las funciones que son promocionadas por Apple en sus presentaciones: solo por mencionar un ejemplo, 3D Touch, función que Apple añadió a sus smartphones a partir de 2015, no puede ser utilizada en el iPhone 6, el cual fue lanzado un año antes, a pesar de ser compatible con iOS 9... esto lleva a que muchos usuarios sientan que su teléfono "es viejo".

• Finalmente, Futuremark recalcó algo bastante interesante: la percepción de que nuestro iPhone se vuelve más lento puede surgir de un "efecto psicológico", el cual provoca que pensemos que nuestro iPhone es inferior, incluso si tiene menos de dos años de antigüedad.

Para finalizar, es importante remarcar algo: sí, nuestros teléfonos, así como nuestras computadoras, van a volverse más lentos conforme reciban actualizaciones que fueron creadas para modelos más nuevos. Sin embargo, considero que es importante analizar y reconocer cuándo nuestro teléfono en verdad se volvió más lento y cuándo es nuestra percepción la que provoca esta idea.

¿Qué piensas sobre este estudio realizado por Futuremark? ¿Crees que sea 100% confiable o haya algunas excepciones que no toman en cuenta? ¡Deja tu opinión en los comentarios!