Como cada año, durante el evento I/O, Google presentó los planes e ideas que tiene actualmente en desarrollo. Una nueva característica que llegará a Android y que llamó mucho la atención del público fue la de Instant Apps.
Tal como su nombre lo indica, esta nueva mecánica permitirá a los celulares utilizar aplicaciones de forma prácticamente instantánea con un interesante giro: el usuario no tiene que descargar (prácticamente) nada de la Play Store.
Los ejemplos que presentó Google fueron muy concisos. Primero, la presentadora dio clic en un enlace de BuzzFeed Video y el celular cargó casi automáticamente una interfaz muy parecida a la aplicación necesaria para visualizarlo. La forma en que funciona Instant Apps es muy sencilla: al hacer clic en un enlace pertinente, el dispositivo entiende la app que estaría relacionada con éste, y descarga desde la Play Store una versión muy light de ella. Y cuando me refiero a muy light, lo digo muy en serio: por el momento, esta nueva modalidad no permitirá la carga de apps de más de 4 MB, pues la intención es que solamente cargue los módulos y assets necesarios para funcionar.
En otro ejemplo, la presentadora pudo comprar un producto de la tienda B&H desde una interfaz muy parecida a la de la aplicación, pero sin tener que pasar por el tedioso proceso de buscar ésta e instalarla después. Instant Apps está tan bien integrado en el sistema operativo que incluso permite usar Android Pay sin necesidad de configuraciones extra. Además, Google aseguró que, cuando llegue oficialmente, la función estará disponible en todos los dispositivos Android desde 7.0 N hasta 4.1 Jelly Bean.
Ya que quedó claro qué son las Instant Apps, surge la duda: ¿qué impacto tendrá su llegada? ¿No funcionan exactamente de la misma manera que si entráramos a la página oficial de alguna marca desde nuestro navegador móvil? La respuesta es ambivalente: sí y no. Fundamentalmente,las aplicaciones que descargamos desde las tiendas tienen funciones y estética muy parecidas a las versiones web de sus contrapartes (a las cuales, por cierto, se les llama web apps), pero las experiencias que ofrecen normalmente son muy diferentes.
Por ejemplo, para usar Facebook, podríamos simplemente entrar a www.fb.com desde el navegador de nuestro celular; sin embargo, la mayoría tenemos descargada la app. Esto es debido a que las aplicaciones nativas pueden aprovechar de mejor manera todas las características de cada celular en específico, permitiendo experiencias más completas para el usuario. Las web apps tienen la ventaja de poder abrirse desde cualquier navegador o dispositivo, pero frecuentemente son más lentas o tienen interfaces más complicadas, ya que tienen que ser universales.
Si la diferencia entre las aplicaciones normales y las web apps es confusa para la mayoría, Instant Apps hace esa distinción aún más difusa. Esta nueva tecnología busca aprovechar lo mejor de 2 mundos: las interfaces y funciones nativas que solo ofrecen las aplicaciones y la posibilidad de acceder sin tener que descargar nada (o prácticamente nada), como las web apps.
Una grandísima ventaja que ofrecerán las Instant Apps es la velocidad de carga. Tal como se puede apreciar en el video anterior, en esta modalidad, la aplicación carga de manera casi instantánea y mucho más rápido que si la presentadora hubiera accedido a la web oficial de Buzzfeed, o que si hubiera descargado la app de B&H. Tal vez en países de primer mundo esta ventaja pueda ser imperceptible, pero este cambio causará un gran impacto en los lugares donde las velocidades de navegación son mucho más bajas.
Por otro lado, Instant Apps también será de mucha utilidad para los desarrolladores, sobre todo los pequeños. Con esta nueva función, ellos serán capaces de mostrar su aplicación de mejor manera sin temor a que el consumidor los ignore por la flojera de instalarla; si a la gente le gusta, ofrecer la opción de descarga será muy sencillo. Debido a que la información mostrada será cargada directamente desde los servidores de Google Play, los devs también podrán ofrecer experiencias más rápidas, completas y dinámicas; sin el costo que supone optimizar las web apps. Incluso podría significar que ya no tendrían que trabajar en una versión web y una aplicación por separado, sino que podrían unificarlas.
El gran ganador aquí es sin duda el consumidor final. Todos hemos tenido que descargar al menos una vez una aplicación para un propósito específico, para después borrarla minutos después de que cumplió su cometido. O quizá hayamos tenido que entrar a la web para poder navegar por un sitio debido a que su app está muy mal optimizada para nuestro dispositivo. Instant Apps reúne las mejores ventajas de ambas corrientes (apps descargables y web apps) y las presenta en una interfaz aparentemente rapidísima. Aún se desconoce cuándo será lanzada oficialmente esta tecnología, pero apunta a ser una situación ganar-ganar para todas las partes involucradas.
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