Hasta el momento, Samsung había mantenido una tradición: presentar su teléfono insignia del año en eventos alrededor del mundo, excepto en Estados Unidos. Esta vez y muy probablemente asumiendo una posición antes Apple, su principal competidor, la empresa celebrará su evento en Nueva York.
Fuera de Estados Unidos, el dominio de Samsung es mucho más notorio. Pero una de las batallas más importantes se libra precisamente en ese país, en donde modelos van y vienen y los tratos para renovar los equipos le otorgan todas las facilidades a los dueños para hacerse del teléfono de moda con poco esfuerzo. Entonces, es lógico que Samsung haya dejado de lado la oportunidad de hacer el gran anuncio en Barcelona.
La cita será en Nueva York el 14 de marzo. Ello le daría unos buenos 90 días de ventaja al Galaxy S4 para acaparar el mercado frente a la hipotética salida de iPhone 5S (o 6) en junio. El Galaxy S4 tendría una resolución mayor a Retina, según los reportes, además de que usaría una de las versiones del nuevo procesador Exynos, aunque se especula que no será la edición de ocho núcleos, sino la de cuatro.
Mientras tanto, el MWC se sigue celebrando en Barcelona y los anuncios no se detienen.
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