Gear 2 Neo vs. SmartWatch 2

Los relojes inteligentes podrían convertirse en la moda tecnológica dominante de los próximos años y a pesar de que iniciaron su trayectoria hace poco, cuando Pebble ejemplificó lo funcional que puede ser esa clase de dispositivos, empezaron a abundar las propuestas que aseguran ser una opción idónea. Llegar al concepto del smartwatch más conveniente se complica en una industria que actualmente es incapaz de proporcionar una definición exacta. Lo mejor es comparar las características de los exponentes más relevantes del momento: el Gear 2 Neo de Samsung y el SmartWatch 2 de Sony. Si bien el propósito de ambos es idéntico, cada uno posee virtudes propias.

Diseño

Más que el teléfono, un reloj es una declaración de identidad y estilo personal. Dado que el dispositivo debe combinar con distintas modas (formal o cotidiana), su estética necesita ser neutral y atractiva. En ese terreno, el SmartWatch 2 cumple su cometido sin ir más lejos, pues su estructura cuadrada se ajusta a casi cualquier tipo de ropa; el problema radica en que es evidente que se trata de un artículo tecnológico. Y es que la estructura angular de la propuesta de Sony ayuda a mantener cierta sobriedad, pero aniquila la frescura. En la mayoría de los casos es cómodo usarlo, desafortunadamente lo plano de su tapa trasera puede ser poco conveniente para ciertas personas, en especial si la correa está muy apretada. Al respecto, el SmartWatch 2 tiene la ventaja de ser compatible con cinturones tradicionales para reloj, así que es posible darle un poco de identidad fuera de lo que Sony plantea. Lo cierto es que sus valores de producción denotan sofisticación, dado que el armazón es de aluminio cepillado y la pantalla está protegida con una cubierta de vidrio, lo que se apega a la llamativa identidad de los teléfonos Xperia.

El Gear 2 Neo fue construido con un aspecto juvenil y hasta cierto punto, futurista. Sus bordes curvos son similares a los de la estructura de la línea Galaxy, pero con diferencias obvias para remarcar el hecho de que Samsung no ofrece un teléfono miniatura para la muñeca, sino un reloj; esta particularidad es una mejora en comparación con el modelo anterior, pues la segunda generación se redujo en tamaño y ahora presenta una estética estilizada. Ahora bien, la desventaja del Gear 2 Neo frente a su mellizo, el Gear 2, está en los materiales de fabricación: en lugar de que su armazón sea de metal, es de policarbonato convencional, que brinda una experiencia menos sofisticada. Para compensar esa deficiencia, sus creadores dan la alternativa de elegir entre 6 colores distintos, con el fin de que cada usuario exprese su personalidad. La arquitectura curva garantiza comodidad para cualquier persona, lamentablemente la correa de goma podría ser molesta para quien está acostumbrado a usar accesorios de metal o de piel.

Pantalla

Nadie espera que la pantalla de un reloj despliegue resoluciones elevadas, pero entre mayor sea la saturación de pixeles, la interfaz estará mejor diseñada. Así, el Gear 2 Neo es superior al SmartWatch 2 en cuanto a experiencia visual, pues su panel AMOLED de 1.63" presenta 320 × 320 pixeles, en tanto el dispositivo de Sony ofrece 220 × 176 pixeles en 1.6" de espacio LCD. Claro, la calidad de una pantalla depende de muchos factores y en cada uno Samsung lleva la delantera (tal vez es el resultado de que fabrica sus propios componentes). Por ejemplo, el Gear 2 Neo es completamente legible bajo la luz del día, los colores que genera se mantienen brillantes bajo cualquier condición ambiental y los contrastes siempre lucen profundos. En oposición, la pantalla del SmartWatch 2 luce colores deslavados la mayoría del tiempo y bajo iluminación muy intensa, es casi ilegible. De hecho, los nuevos modelos de Gear son capaces de desplegar una paleta de 16.8 millones de colores de 24 bits con 256 niveles de intensidad; la segunda versión de SmartWatch consta de 262,000 colores con base de 16 bits y 64 niveles de intensidad.

Software

A pesar de que aún no se define el propósito específico de un smartwatch, de momento se conceptúa principalmente como centro de notificaciones, así que para validarse, un reloj inteligente necesita ofrecer funcionalidad con todos los avisos y alertas que producen redes sociales, apps y demás servicios en línea. Al desarrollar una interfaz propietaria, Sony permitió que el SmartWatch 2 tenga gran compatibilidad con Twitter, Facebook, Gmail y otras aplicaciones populares. Más que listar los mensajes en texto plano, la interfaz despliega datos adicionales, como el remitente, la hora y el tipo de interacción, dependiendo de la app que genere cada notificación. El único inconveniente es que, por carecer de micrófono, no es posible contestar llamadas de voz. Cabe señalar que la personalización no va más allá de cambiar carátulas preestablecidas, además de que hay pocas aplicaciones disponibles; por otro lado, el menú está bien organizado y la interfaz es fácil de entender.

En el caso del Gear 2 Neo, el funcionamiento de las notificaciones es muy austero. Hay avisos de todo lo recibido, acompañados del ícono de la app involucrada, no obstante, el contenido se muestra en forma de lista y la mayoría de las veces el texto se corta; para visualizar el mensaje completo es necesario recurrir directamente al teléfono. La compensación de esas carencias se encuentra en el soporte para voz, pues permite contestar llamadas con la misma claridad —o hasta mejor— que la común en un teléfono. En todo caso, es una lástima que las funciones de S Voice no puedan aprovecharse para tomar dictado y con ello, responder directamente las notificaciones sin tener que sacar el smartphone del bolsillo.

Un defecto que no es culpa del Gear 2 Neo, pero que al final afecta la experiencia de uso, es que Tizen tiene muy poco soporte de la comunidad de desarrollo, así que el catálogo de apps es muy limitado. Siendo justos, el SmartWatch 2 tampoco cuenta con tanto software, pero Sony suele colaborar estrechamente con los autores para asegurarse de que lo esencial sea lanzado en su reloj. En todo caso, Samsung aventajaría su posición al adoptar Android Wear; después de todo, la línea Gear puede funcionar con el sistema operativo de Google para dispositivos portables.

Características

Otra cualidad importante del Gear 2 Neo es que, igual que la mayoría de los dispositivos relevantes de Samsung, ofrece más funciones y características que el promedio. Aunque el dispositivo no cuenta tantos añadidos como la edición original del Galaxy Gear, incluye beneficios adicionales que podrían justificar la existencia de un complemento tan parecido a un teléfono. Mientras el SmartWatch 2 sólo tiene un podómetro, el dispositivo de Samsung está equipado con más funciones de acondicionamiento físico. Por medio del servicio S Health, también disponible en los Galaxy S y Galaxy Note recientes, el Gear 2 Neo puede medir el ritmo cardíaco y hasta llevar un conteo preciso de otras actividades diarias, como el número de escalones subidos. Claro, la información dista de ser tan certera como la generada por aditamentos más especializados —incluyendo la FuelBand de Nike o los productos de Fitbit—. Además, esta variante de Gear tiene un control remoto que funciona a través de infrarrojo y se sincroniza con el teléfono para ayudar a localizarlo al activar una alarma sonora.

Ambos dispositivos fueron pensados para uso rudo, lo que implica protección contra agua y polvo. La diferencia es que el SmartWatch 2 tiene la capacidad para sumergirse por breves períodos, mientras que el Gear 2 Neo únicamente sobrevive a salpicaduras profundas, es decir, puedes entrar en la regadera con él. Un aspecto incómodo, pero digno de mención, es que para recargar la batería de los relojes de Samsung hace falta removerlos de la muñeca y colocar un adaptador; en el caso de la propuesta de Sony basta conectarlos directamente a un cable USB. Hablando de la pila, ninguno de los 2 tiene buen rendimiento, no obstante el dispositivo de Sony dura aproximadamente 3 días y medio, casi el doble de lo que ofrece el Gear 2 Neo.

Veredicto

Como siempre, la decisión final no depende de valores absolutos, sino de necesidades específicas. El SmartWatch 2 es una propuesta con gran funcionalidad, ofrece suficiente personalización, es compatible con numerosos dispositivos Android y su diseño minimalista encaja con más estilos de moda. El problema es que su batería no dura mucho, la app para reproducir música no está bien diseñada y su pantalla es de baja resolución. Por otra parte, el Gear 2 Neo presenta una propuesta estética fresca, es más poderoso, su pantalla despliega elementos muy coloridos y brillantes, y cuenta con numerosas características. Su defecto radica en que no puede usarse con teléfonos diferentes a los que fabrica Samsung y que las notificaciones son muy simples.