Aunque el desarrollo de los coches autónomos supone una mejora para la calidad de vida de las personas, también representa un nuevo frente tecnológico en donde los hackers pueden hacer de las suyas.
Por eso, algunos de los principales fabricantes de la industria automotriz, trabajará junto con el gobierno de Estados Unidos para tratar de detener que cibercriminales se conecten a los autos de los usuarios y se convierta en un tema mayor.
Hasta ahora, no hay reportes de grandes ataques cibernéticos a los autos, pero los expertos en seguridad informática señalan que este tema debe de ponerse sobre la mesa y empezar a trabajar al respecto.
El Departamento de Transporte de Estados Unidos, también conocido como DOT, firmó un acuerdo para trabajar muy de cerca con la industria para desarrollar un plan de trabajo de seguridad proactiva como ya ocurre en la industria de la aviación.
Como parte de los planes, los fabricantes y el gobierno van a desarrollar mejores prácticas para desarrollar autos resistentes a los ataques cibernéticos, y colaborar con la comunidad de investigación en seguridad cibernética.
Para esto, el grupo buscará maneras de mejorar el intercambio de información a través de un grupo recién formado por la industria llamado Auto-ISAC. Este grupo también está abierto a los proveedores de piezas de autos y los investigadores que trabajan en desarrollar vehículos conectados y autónomos.
Es probable que para que los autos autónomos puedan llegar a los caminos, deban cuimplir con requisitos de seguridad cibernetica, además de la seguridad de conducción.
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