Todo cambió con el iPhone 6s y a la vez, nada

El tema de la innovación se ha vuelto algo innecesariamente complejo en la industria tecnológica, en particular porque todas las compañías quieren venderse como los grandes revolucionarios del siglo... cuando en realidad no lo son. Apple es especialista en eso, al siempre querer convencernos de que sus productos son fabulosos por innovar donde otros no han podido. Pero la verdad es que su habilidad no está en lo novedoso, sino en perfeccionar conceptos y la mancuerna de iPhone 6/iPhone 6s son otra gran evidencia que se suma a las muchas que ya hay.

Por ejemplo, Apple dice que el 3D Touch nos cambiará la vida —tal vez es cierto, aunque probablemente no— porque se trata de un sistema que detecta con mucha precisión los toques de tus dedos sobre la pantalla del iPhone 6s. Es algo muy parecido a lo que ya hace el Apple Watch, pero mejorado, ya que el nivel de sensibilidad es mucho mayor. Esto da pie a nuevas funciones, como menús desplegables, íconos con información dinámica, en fin, las posibilidades son ilimitadas —al menos según lo que presume Apple—.

Sólo tienes que tocar ligeramente la pantalla y la respuesta será diferente que los toques habituales que haces en tu viejo teléfono. Ese tipo de interacción se llama peek —traducido como echar un vistazo— que, como su nombre lo dice, permite dar una vista rápida a otras características de un ícono o un elemento de algún menú. Por ejemplo, si das peek a la app de la cámara, te da la opción de ir directamente a tomar una selfie. Y cuando haces peek sobre la app de Facebook, puedes elegir entre ir al muro, tomar una foto o revisar tus grupos. En resumen, te ahorra algunos pasos y hace más rápido el uso de todo en el teléfono.

Es, en palabras de Apple, la evolución del multitouch. Tiene mucha razón, pues es una mejor forma de aprovechar algo que ya existía. Pero una vez más, no hay innovación, sólo sofisticación. Lo mismo pasa con las cámaras.

Ya puedes tomar fotos de 12 megapixeles con la cámara del iPhone 6s y el iPhone 6s Plus. Es un incremento que los fans de Apple agradecerán con aplausos, ya que desde 2011 que no se incrementaba el conteo de pixeles. La compañía dijo hace tiempo que no quería aumentar la capacidad de la cámara porque eso resultaría en imágenes más granuladas, pero al parecer, ya consiguió el aumento de tamaño y con una mejor calidad. Además, el enfoque automático es más eficiente y al fin hay opción de grabar en 4K. Mientras tanto, la cámara secundaria mejoró, ya que ahora es de 5 megapixeles y para complementar las selfies, Apple hizo que la pantalla sirva de flash —se prende 3 veces más brillante de lo que normalmente lo haría—.

Por otra parte, Apple dice que como estarás usando mucho más las cámaras del iPhone 6, necesitas un toque extra para aprovecharlas al máximo y para eso tiene algo que se llama live photos. Son videos pequeños —muy al estilo Vine— que te dan mayor contexto de la foto fija, para que recuerdes con más emoción del momento.

En cuanto a lo demás, es el mismo iPhone que ya conocemos. Es difícil negar que se antoja más que el actual iPhone 6 Plus, pero como ya es costumbre con Apple, la innovación no está entre las razones. Claro, sería necio esperar otra cosa diferente, el problema es que el iPhone ha tenido destellos de genialidad en su historia: cuando salió fue la razón para que se reinventaran los celulares, su pantalla Retina obligó al resto a mejorar la calidad de las pantallas y el flash True Tone dio nueva vida a las fotografías de un smartphone.

Ahora, ninguna segunda versión de un iPhone —los modelos "s"— se ha caracterizado por tener algo sumamente novedoso, así que en eso Apple no falló. Y a pesar de que no hay algo nuevo, seguro que el iPhone 6s y el iPhone 6s Plus venderán como pan caliente, tal vez más que sus antecesores. Si los quieres, podrás comprarlos a partir del 25 de septiembre al mismo precio que el iPhone 6 y el iPhone 6 Plus —estos bajarán de precio, como ya es habitual con los modelos viejos—.