Si bien las pantallas de enormes dimensiones suelen lucir impresionantes en los smartphones —en especial cuando tienen muy alta resolución—, presentan un grave problema: a mayor tamaño, más grande es el armazón. Para evitar que los teléfonos sigan creciendo al punto de ser incómodos de usar, LG desarrolló un concepto de pantalla con bisel ultra delgado, el cual, por cierto, es más barato de fabricar.
Neo Edge es un proceso para fabricar pantallas que al unir los circuitos, la superficie táctil y el panel de retroiluminación, reduce el grosor del bisel
Lo interesante es que se trata de un invento que supera incluso al Aquos Crystal de Sharp, pues además de que la pantalla de 5.3" tiene resolución 1080p y un espesor de apenas 0.7 milímetros, cuenta con una protección contra agua y polvo. De acuerdo con los ingenieros de LG, el método de fabricación consiste en usar adhesivos especiales para unir las capas del panel, lo que se traduce en una estructura mucho más sólida. Ahora bien, otra ventaja de esta técnica es que al sellar todos los componentes de la pantalla, ya no se escapa la luz y, en consecuencia, el brillo es considerablemente más alto.
Considerando las ventajas de una pantalla tan sofisticada y carente de biseles, queda preguntarse qué tanto se reducirá la resistencia del teléfono, ya que el bisel también ayuda a darle estabilidad a la estructura del armazón. Al margen de las inquietudes, LG dice que la tecnología ya está lista para la línea de producción y que los primeros modelos en utilizar este tipo de pantalla llegarían a principios de 2015.
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