Nota: Este artículo contiene ligeros spoilers sobre la nueva película de Netflix, Okja.
El streaming de series y películas ha causado revuelo en los últimos seis años, y el avance que ha tenido es impresionante: para la concepción de House of Cards, una de las primeras y más populares series de Netflix, Ted Sarandos decidió aceptar producir este proyecto a base de simples datos estadísticos, con los que se determinó que un drama político con Kevin Spacey atraería a múltiples espectadores… cinco temporadas después, este programa se ha convertido en un éxito rotundo.
Netflix y Okja
Con mucha confianza, podemos decir que Netflix produce contenido de calidad, y sus avances agresivos han llegado poco a poco al mercado del cine: en 2014, The Square, un documental sobre la revolución egipcia de 2011, ganó el Premio de la Academia a la Mejor Película Documental. Actualmente, la empresa americana apostó por el genio del director coreano Bong Joon-ho: con el lanzamiento de su nueva película, Okja, exclusivamente por Netflix, encontramos una nueva razón por la cual elogiar al servicio de streaming.
Okja es, ante todo, una historia de amistad entre una niña y su super-cerdito. Sin embargo, es a través de la narrativa que se desenvuelven múltiples dilemas morales: con una empresa transnacional con prácticas dudosas, así como una organización extremista que puede resonar con nuestra actualidad, esta película detona una cantidad impresionante de discusiones mediante su simple pero significativa narrativa y sus bellas, pero a veces crudas, imágenes.
Con seguridad, podemos decir que esta película ha llamado la atención del público y críticos por igual: si viéramos a Okja en la lista de nominaciones anuales, no sería una sorpresa. No obstante, es un suceso en el reciente Festival de Cannes que inicia nuestra problemática.
Cannes: emblema del cine y fuente de la controversia
Del 17 al 28 de mayo, se celebró en Francia el 70º Festival de Cine de Cannes. Con 19 películas proyectándose en el festival para competir por el premio principal, la Palme d’Or, una de ellas fue la ya mencionada Okja: debido a la naturaleza de su producción, inicialmente fue recibida con múltiples abucheos.
Pero, ¿por qué la recepción negativa de parte de Cannes? la respuesta, en este caso, es multifacética; sin embargo, si tuviéramos que resumirlo en pocas palabras, la razón principal por tal abucheo es simple… Okja no fue hecha para las salas de cine. Al ser concebida para nuestras pantallas de televisión y no para la pantalla grande, se proyectó en Cannes un filme que va en contra de los principios de muchos cineastas ahí presentes.
Debido a la participación de esta película en el festival, una nueva regla fue añadida para próximas ediciones: todo filme que quiera ser considerado como candidato debe ser proyectado en una sala de cine de Francia. Esto, en pocas palabras, quiere decir que una película como Okja podría no participar en este festival a menos que realizara proyecciones extraordinarias.
Esta situación, la cual surge a partir del cambio en el funcionamiento del mundo del cine, nos presenta una pregunta: ¿está mal negar un premio a una película si no es exhibida en una sala de cine?
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El cine no es cine sin la experiencia
En cada año, un jurado de diversas personalidades de la industria del cine forman parte del festival de Cannes: en esta ocasión, presidió sobre este Pedro Almodóvar, galardonado y talentoso director español. En una entrevista con la prensa, Almodóvar habló sobre Okja, y por qué considera irregular que una película disponible sólo vía streaming participe en la competencia:
Esta nueva forma de servicio no debe de tratar suprimir los ya existentes, como por ejemplo ir al cine. Bajo ninguna circunstancia deben cambiar los hábitos de los espectadores y creo que ese es el debate ahora mismo. Para mí la solución es simple: las nuevas plataformas deben asumir y aceptar las reglas del juego actual, las cuales implican respetar las actuales ventanas de los distintos formatos de exhibición. Creo que sería una enorme paradoja si la Palma de Oro, o cualquier otro premio, sea para una película que no se pueda ver en salas.
Como podemos percatarnos, es la experiencia que implica ver una película lo que se encuentra en discusión. Y es que la diferencia entre ver Okja en nuestros hogares o ver, por ejemplo, Dunkirk en el cine es extremadamente diferente: cada director planea su película con un propósito distinto; es aceptable pensar que el ambiente en el cual veamos la película (ya sea una sala IMAX, o incluso 3D) también es considerado.
Añadiendo a este punto, Christopher Nolan, director de la ya mencionada película Dunkirk, habló sobre la forma en la que Netflix aborda a la producción de contenido original de larga duración. Sus palabras, sin embargo, no fueron agradables:
Creo que la inversión que Netflix hace en cineastas y proyectos interesantes sería más admirable si no fuera utilizada como una forma bizarra de provocar el cierre de las salas de cine. Creo que no tiene sentido, y honestamente no lo entiendo.
Y sí, es cierto: aunque sólo será transmitida en Netflix, Bong Joon-ho, de acuerdo a múltiples entrevistas, tuvo rienda suelta para trabajar con Okja. Anteriormente, películas que elaboró con otros estudios cinematográficos le hicieron omitir contenido del corte final: de acuerdo a Joon-ho, si Okja hubiera sido producida con un estudio tradicional, es probable que la película no existiera.
Una película diferente para una época diferente
A pesar de tantas palabras negativas para Okja y Netflix, hay una campaña a favor de ellos. Tilda Swinton, actriz que participó en esta película, tuvo una respuesta contundente respecto al comentario inicial de Almodóvar:
A diferencia de las palabras de Nolan, Swinton utiliza un concepto importante que considero la base de los argumentos en pro de permitir la premiación a Okja: un espacio para todos. Negar la presencia en Cannes a una película por el simple hecho de no ser proyectada en salas de cine puede hacerse para preservar la “tradición”, pero, ¿qué acaso el cine no busca innovar a través de conceptos evocativos y premisas interesantes? ¿no cumple Okja con estas características?
Vale la pena mencionar que, aunque Almodóvar expresó su sentir como presidente del jurado, hubo otro miembro del mismo que también hizo saber su opinión al respecto: Will Smith.
En casa, mis hijos salen al cine un par de veces a la semana, y también ven Netflix. No se en otras casas, pero en mi hogar Netflix no ha tenido absolutamente ningún efecto en lo que van a ver al cine. (…) En mi hogar, Netflix ha sido todo un absoluto beneficio porque pueden acceder a películas que no han podido ver de otro modo: [Netflix] no ha hecho otra cosa que extender el conocimiento cinematográfico global de mis hijos.
Eso es verdad: el que Netflix sea tan exitoso no hará que los cines desaparezcan de la noche a la mañana. Así como Almodóvar cree que Netflix debería de adaptarse a las condiciones ya existentes, ¿por qué no puede la industria cinematográfica tradicional permitir a Netflix introducir su apertura a la libertad creativa a los cineastas?
La creatividad ante todo: ¿cómo resolver el debate?
Cuando nos planteamos nuevamente la pregunta inicial, ¿está mal negar un premio a una película si no es exhibida en una sala de cine?, creo que hay una respuesta que recibe influencias de ambos lados: No, pero es necesario que la comunidad cinematográfica permita una apertura a que sea posible en un futuro.
En casos como los premios de la Academia, Netflix lanzó The Square en tres salas de cine para que fuera elegible al premio. En un futuro, cualquier candidato a participar en Cannes debrá proyectar su película en Francia: sin embargo, las leyes de este país declaran que toda película proyectada en el cine debe permanecer fuera de plataformas de streaming por tres años… claramente, esto no es conveniente para una película producida por y para Netflix.
Y es que, al final de todo, este debate debería de pasar de “Okja debería de poder ser premiada” a “filmes de Netflix como Okja deberían de ser apreciados por todos, de la misma manera que una película proyectada en una sala de cine”: el cine fue hecho, principalmente, para ser apreciado, disfrutado y permitir a las personas vivir historias en mundos parecidos o distintos al nuestro, y el prejuicio existente de reconocidos directores puede perjudicar gravemente a la industria.
Ante todo, es importante recordar que esta es mi opinión, por lo que nuestros puntos de vista pueden diferir. En vista de esta situación, ¿qué piensas sobre la controversia alrededor de Okja? ¿crees que alguno de los bandos tiene la razón absoluta? ¡espero tu opinión en los comentarios abajo!
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