Aunque Oculus Rift ha sorprendido a todos con su grandiosa realidad virtual en sus versiones de 720p y 1080p ―y próximamente 4K―, el dispositivo aún tiene un par de inconvenientes para ciertas personas, pues el motion blur de su pantalla LCD marea a muchos usuarios después de cierto tiempo de uso. Para resolver estos problemas, Oculus VR anunció un nuevo prototipo llamado Crystal Cove, y hoy se presentó en CES 2014.
El nuevo modelo del headset de realidad virtual reemplaza el LCD con una pantalla OLED, la cual tiene menor latencia y elimina el motion blur gracias a que reduce dramáticamente la persistencia de la visión. Esto último se logra gracias a que, después de mostrar una imagen, la pantalla se ve negra antes de introducir el siguiente cuadro. Esto se lleva a cabo de una manera tan veloz que es imperceptible para el ojo humano, pues la mente rellena esos espacios vacíos, haciéndolos más suaves.
Otra novedad importante que trae Crystal Cove es la integración de un sistema de seguimiento de posición, el cual consiste en una cámara que monitorea más de una docena de sensores infrarrojos incrustados en el Oculus Rift. Con esta adición, el headset puede detectar cuando el usuario se inclina o se agacha y reproducir la acción en la pantalla.
Oculus VR aún no revela una fecha de lanzamiento de Oculus Rift. Por otra parte, se sabe que la versión de 720p no llegara al mercado para abrir paso a la de 1080p, y es probable que Crystal Cove llegue como la opción más completa y costosa.
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