La búsqueda por el remplazo de Steve Ballmer no ha sido fácil, en especial porque algunos candidatos se negaron a participar casi desde el inicio y otros simplemente no parecen tener la visión necesaria para que los negocios funcionen en óptimos términos. Pero las complicaciones del proceso son necesarias, después de todo, Microsoft es una de las compañías más relevantes en la industria tecnológica y requiere de un líder capacitado para la transición a una nueva era. Por esa razón, la mesa directiva de la compañía aplazará algunos meses más su decisión, pero no más allá de principios de 2014.
John W. Thompson, un miembro del concejo ejecutivo de Micrososft, decidió esclarecer la confusión respecto al proceso de sucesión de director general y por medio de un comunicado oficial, explicó que durante los últimos meses se han entrevistado a más de 100 posibles candidatos: "Descartamos a varias docenas y al final, decidimos concentrar nuestra energía en un grupo de 20 individuos, todos con habilidades muy impresionantes. Como es de esperarse, este grupo se redujo después de que hicimos una extensa investigación de cada perfil, incluyendo a algunos de nuestra mesa directiva. Las cosas están saliendo muy bien y esperamos concluir nuestro trabajo tan pronto como sea posible del próximo año".
Los representantes de Microsoft admiten que si bien la transición se está dificultando en ciertas áreas, cada división del corporativo mantiene un compromiso de calidad con su misión y objetivos. "Nuestros empleados produjeron resultados financieros muy satisfactorios durante el último trimestre fiscal de 2013. Además, el lanzamiento de Xbox One se experimentó alrededor de todo el mundo. Todos en la junta ejecutiva apreciamos el continuo esfuerzo", añadió Thompson.
Al margen del optimismo, Microsoft debe encontrar a su siguiente director general a la brevedad, pues el retraso impactará de manera negativa en la opinión de los accionistas y en consecuencia, en la estabilidad económica, sin mencionar que las estrategias comerciales recientes demandan un líder que dé una mejor dirección. Basta recordar que los intentos por incursionar en el ámbito móvil no han sido del todo estelares, con Windows Phone y Surface como evidencia, e incluso si la división de productos y servicios es una afortunada adición para mejorar dicha condición, hace falta alguien con gran visión y excelente poder de ejecución.
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