Ayer, 28 de mayo, la cadena NBC transmitió la primera entrevista de un medio estadounidense con Edward Snowden, exempleado de la Agencia Nacional de Seguridad de Estados Unidos (NSA, por sus siglas en inglés), quien filtró documentos confidenciales del Program Review Instrument for Systems Monitoring (PRISM, por sus siglas en inglés), un programa secreto cuyo objetivo es recolectar comunicaciones y datos privados.
Snowden ha sido blanco de críticas y elogios en todo el mundo durante el último año, y hay personas que piensan que sus acciones representan un acto patriótico, mientras que otras lo consideran un traidor por el hecho de haber tratado de viajar a Cuba y vivir asilado en Rusia después de que el gobierno estadounidense revocara su pasaporte cuando intentaba abordar un avión con destino a la isla del Caribe y levantara cargos de espionaje en su contra.
La entrevista, que se llevó a cabo en un hotel de Moscú, fue conducida por Brian Williams, presentador del noticiero nocturno de la NBC. Williams y Snowden platicaron durante varias horas, en las cuales el informante aprovechó para justificar sus acciones, defender su postura y exponer las razones por las que decidió que lo correcto era alzar la voz y poner en evidencia al gobierno de su país.
"La realidad es que la situación determinó que esto debía hacerse público. La Constitución de Estados Unidos había sido violada de forma masiva. Si esto no hubiera sucedido, si el gobierno no hubiera ido demasiado lejos y sobrepasado los límites, no nos encontraríamos en la situación en la que los soplones son necesarios", expresó Snowden.
Snowden explicó de qué manera el gobierno estadounidense está usando la amenaza del terrorismo para justificar la implementación de programas especiales para la supuesta protección de la población, cuando en realidad atenta contra sus libertades y derechos, los cuales están claramente definidos en la Constitución de esa nación.
Según él, los analistas de la NSA "son capaces de observar las comunicaciones de las personas en Internet, leer su correspondencia, ver sus pensamientos mientras escriben. Este tipo de vigilancia es una intrusión extraordinaria en la manera en que piensas."
Cuando se le preguntó acerca de su puesto y funciones dentro de la NSA, Snowden relató que fue entrenado como espía profesional e incluso usaba un nombre falso y pretendía desempeñar labores distintas a las reales: "Ahora el gobierno lo niega. Podrán maquillar la verdad de diferentes maneras y decir que yo era un analista de bajo perfil, pero lo que en realidad tratan de hacer es emplear un puesto que desempeñé [en algún momento de mi carrera] para distraer la atención de mi experiencia completa". Aquí cabe señalar que aseguró no ser un espía y no tener relación alguna con el gobierno ruso.
"No conozco al presidente ruso. El gobierno ruso no me apoya. No recibo dinero del gobierno ruso. No soy un espía." —Edward Snowden
El exanalista también comentó que terminar en ese país europeo fue una sorpresa, pues tenía un vuelo reservado para viajar a Cuba y de ahí a Latinoamérica, pero su pasaporte fue revocado, por lo que no ha podido abandonar Rusia desde hace casi un año. "Si pudiera ir a cualquier lugar en el mundo, sería a mi hogar", agregó.
Un momento importante en la entrevista fue cuando Snowden se reconoció como patriota después de que Williams lo cuestionara al respecto.
Este comentario provocó que John Kerry, secretario de Estado de Estados Unidos, expresara lo siguiente: "Los patriotas no se van a Rusia. No buscan asilo en Cuba. No buscan asilo en Venezuela. Los patriotas pelean por su causa aquí. Edward Snowden es un cobarde. Es un traidor y ha traicionado a su país. Si quiere volver a casa mañana y afrontar las consecuencias, puede hacerlo."
Debido a que está acusado de espionaje, Snowden descarta la posibilidad de defender su caso públicamente: "No se permite alegar a tu favor porque la evidencia puede estar compuesta por información clasificada. Cuando la gente me pregunta por qué no afronto las consecuencias, les respondo que deben entender que no seré juzgado en una corte abierta y mi juicio no será justo".
La historia de Edward Snowden está lejos de concluir. Sus acciones pueden ser señaladas como encomiables o reprobables, pero la información que filtró y lo que se desencadenó a raíz de ello marcó al mundo entero. A partir de entonces el tema de la privacidad y el libre acceso a la información es vigilado intensamente por la sociedad y las empresas en general. Sin importar el desenlace de su caso, Snowden nos abrió los ojos acerca de lo sucede con nuestra información.
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